martes, 7 de junio de 2016

Peter Greenaway, el maestro de las composiciones visuales

Mihaela Radulescu/05.06.16
Su  formación en pintura le ha proporcionado no sólo el hábito de una composición semántica y sintácticamente articulada, visible  en sus películas,   sino también el interés por el modo en que otros artistas han abordado la composición para construir sus mundos y por el mismo ímpetu de la composición como procedimiento generador de mundos .

En el contrato del dibujante The Draughtsman's Contract ( 1982), Neville incluye en sus dibujos detalles que  serán interpretados como pistas de una conspiración. Su visión es aguda, abarca todo y se obsesiona con ciertos referentes,  las frutas, las figuras mitológicas, ciertos paisajes. El resultado es un barroquismo lleno de simetrías y detalles, con densidad de símbolos. Usa la perspectiva juntando los componentes geométrico y psicológico en la representación de la realidad desde cierto  punto de vista.


 En Nightwatching ( 2007) se centra en  el famoso cuadro de Rembrandt, “Ronda de noche” y en el proceso de su realización:

 Su interés además por la simetría y la arquitectura  es evidente en El vientre del arquitecto ( 1987):


En Eisenstein en Guanajuato (2015) su interés por el director ruso conjuga el desmontaje de la mirada cinematográfica con el intento de captar el impulso vital de la creación de mundos que signifiquen lo más profundo de la existencia. Leer entrevista:


Habrá que profundizar  en la composición en la filmografía de Peter Greenaway en las siguientes películas:
'A zed and two noughts' (1985)
'El cocinero, el ladrón, su mujer y su amante' (1989)
'El niño de Mâcon' (1993)
The pillow book' (1996)
Conspiración de mujeres (1998)